Imprensa paraguaia publica foto de foguetório em frente a hotel do Libertad
¿Clima de guerra en Río? Bombas, racismo y presión para “Topo"
¿La Libertadores volvió a sus raíces? A juzgar por lo ocurrido en las últimas horas en Río de Janeiro, donde Vasco da Gama recibe a Libertad, todo indica que sí. Los gumarelos debieron soportar varios inconvenientes.
Todo comenzó a poco de finalizar el partido de la semana pasada disputado en Asunción (1-1), con las denuncias de los jugadores del Vasco da Gama sobre supuestas reacciones racistas de los hinchas de Libertad.
“Solo nos enteramos de lo que habría sucedido en el estadio cuando la prensa brasileña publicó las informaciones. Hasta entonces, no hubo ninguna manifestación del Vasco. Es imposible controlar lo que las personas dicen. Procuramos cumplir con todo lo que nos solicitaron”, dijo el vicepresidente Carlos Guggiari al ser consultado sobre el asunto, por la prensa brasileña.
Al preguntársele sobre el hecho que no se permitiera a los brasileños entrenar en el estadio Nicolás Leoz, el directivo gumarelo aclaró: “Finalmente no entrenaron, pero hicimos lo posible”. “Vasco llevó dos uniformes para el partido y nosotros tuvimos que cambiar el nuestro para que el árbitro pudiera iniciar el partido, cuando no deberíamos hacer eso”, agregó recordando que el Guma tuvo que ceder un derecho reglamentario.
¿Clima de guerra? Pese a todo lo ocurrido, Jorge Burruchaga no quiso darle ese calificativo al cotejo marcado para las 22:00 horas de este jueves, en el estadio São Januário. Prefirió recordar que este clima es típico de la Copa Libertadores.
“Será un partido con clima de Copa, como debe ser. Vinimos aquí para jugar fútbol. Lo que sucedió en Asunción fue un partido duro, con expulsiones, pero que acabó ahí. Cinco o seis personas se manifestaron de una forma que no deberían, no da para controlar a todo el mundo”, aseguró el DT.
El “Topo” también evade polémica. Otro requerido por la prensa brasileña, que estaba a fin de seguir “calentando” el partido de esta noche, fue el mediocampista Víctor Cáceres, a quien indagaron por el lado del interés que tendría el Flamengo, archirrival del Vasco, en contratarlo.
“No tengo que preocuparme con Flamengo, solo con el partido con Libertad”, se limitó a responder el “Topo” cuando le preguntaron por su inminente ida al conjunto rubronegro. “No tengo nada arreglado, un contacto si hubo, pero soy jugador de Libertad”, agregó mientras huía raudamente de los periodistas en el aeropuerto de Río.
Bombas de “bienvenida”. Y, como si la presión de la prensa no bastara, los hinchas del Vasco también pusieron de su parte para calentar el partido y, sobre todo, para molestar a los jugadores de Libertad.
Frente al hotel en el que está alojada la delegación gumarela, en la playa de Copacabana, los hinchas hicieron estallar una buena cantidad de petardos por espacio de quince minutos. Ocurrió pasada la medianoche y al amanecer de este jueves.
Aún así, el plantel descansó bastante bien y esta mañana arrancó el día con trabajos livianos, a la espera del cotejo de esta noche. Como líder del Grupo 5, con 7 puntos, a Libertad le basta un empate frente al Vasco (4) para seguir en la cima de la clasificación.
Fonte: Paraguay.com
